Enzo, de 38 años, acude a la consulta porque ya no sabe que más puede hacer para intentar olvidar a Noa, de 32 años de quien le separa multitud de factores tanto personales como sociales, económicos e incluso culturales. Sin embargo, Enzo insiste en abordar a Noa, en cualquier lugar y circunstancias –muchas veces, inoportunas– lo cual requiere una intervención antes de que la situación se desborde, “Enzo, date cuenta, tú lo sabes, Noa es un amor imposible”
¿Qué es un amor imposible?
Enzo y Noa se sentían atraídos mutuamente, podríamos decir que existía amor entre ellos. Sin embargo, por diversos motivos –en su caso, sociales, económicos y culturales- hacían que no pudieran mantener una relación firme, tal y cómo hubieran deseado ambos.
¿Existen varios tipos de “amores imposibles”?
Podemos diferenciar entre:
– Amor prohibido: Si el motivo por el cual Noa no puede comprometerse con Enzo es porque ya esta comprometida, incluso casada, sus posibilidades quedan reducidas a tomar caminos separados -olvidándose el uno del otro lo cual, a priori, no parece tan fácil– o bien, para ambos, romper sus compromisos previos si los hubiera –lo cual, a priori, podría ser aún más complicado especialmente si hay hijos-. En cualquier caso, ninguno de los dos se debería conformar con compartir su amor con dos terceras personas, por lo menos, ya que deja de ser un amor real para pasar a ser un amor que, más tarde o más temprano, será tóxico y os acabará haciendo daño a todos los implicados. Por ello, y en cualquier caso, si estás en esta situación, lo mejor que puedes hacer por ti mismo es alejarte, lo máximo posible…
– Amor con barreras: Quizás tanto Enzo como Noa son personas sentimentalmente libres. Pero puede que la distancia entre ambos, como así ocurría en este caso, se debería a diversos factores: Clase social, oposición de la familia, en este caso, de Noa… Si os halláis en este caso, deberéis ser capaces de mantener la cabeza suficientemente fría para decidir si vale la pena invertir vuestros esfuerzos en la lucha que os espera; estigmatización, etiquetaje, discriminación, en el caso de Enzo, pérdida de privilegios o de posición social para el caso de Noa. Muchas veces, actuar de forma excesivamente impulsiva, sin haber reflexionado acerca de la situación, nos acaba haciendo dependientes de una relación que sólo nos causa dolor, antes de llegar a su fin y tener que volver a casa.
– Amor tóxico: Tanto Enzo como Noa, dos personas solteras y libres, sienten una profunda atracción e inician una relación. Sin embargo, cuando está parece que ya se está consolidando se inician las discusiones constantes porque tenéis maneras de ver la vida, perspectivas y opiniones opuestas. Dais por terminada la relación. Pero, ninguno de los dos puede olvidarse del otro y, por ello, poco tiempo después, lo volvéis a intentar y, de nuevo, terminará. Esto se convierte en un bucle, de modo que la relación se reinícia y se acaba en multitud de ocasiones. Sin embargo, es mejor asumir la realidad y que Enzo no siga sumido a un amor que no podrá ser y, por tanto, se debería cerrar el capítulo para abrir uno nuevo.
¿Se puede superar un amor imposible?
Efectivamente, se puede. Es posible que en este momento justo al final de la relación, no lo veas nada claro pero, dentro de un tiempo, el amor roto se habrá curado.
– Ante todo, no te obsesiones con tu ex-pareja a través de las redes sociales.Eso significa que no le debes llamar, enviar whatsapps, chatear a través de cualquier red, dar “likes” o “retwittear” ni tan solo preguntar por él o ella a los que eran vuestros amigos en común.
– Debes expresar tus emociones. No te “tragues” lo que sientes porque acabará pesándote mucho tu mochila emocional y, por ello, es importante que te liberes, a nivel emocional, con el profesional adecuado. De hecho, tras estas experiencias tan dolorosas, muchas personas reflejan su proceso en las artes, la música y la literatura.
– Asume para poder reconstruir: Para poder olvidar tu amor acepta que llegó a su fin. La realidad es la que es y no la que te gustaría que fuera y es por ello, que debes poner el punto y final. Sólo así podrás reconstruirte y volver a ser feliz.
– Ha llegado el momento de cambiar. Debes empezar una nueva etapa y, para eso, necesitas cambiar. Empieza curando tu interior y sin intentar rellenar el vacío que ha dejado tu ex con una nueva pareja. Estos procesos requieren de un tiempo, concédetelo.
– No te quedes en casa. No es la manera de olvidar a tu ex, al contrario, sal, haz amigos, conoce nueva gente, escoge los amigos que lo sean de verdad, haz cosas agradables… Sin embargo, no corras en búsqueda de una nueva persona y tampoco te muestres resentido con tu ex al hablar de él o ella con tus amigos. De hecho, es importante pasar un tiempo a solas, hasta adaptarse a la nueva realidad, para aprender de uno mismo y para saber ser más feliz por ti mismo.
– No has fracasado. Que no puedas seguir con tu ex, nada tiene que ver con tus valores. Por lo general, una relación se puede romper por un sinfín de problemas distintos y, la inmensa mayoría de estos motivos, no están bajo tu control y por tanto, no tienen solución.
– Activa tu diálogo interno positivo: Mírate al espejo, varias veces al día, y di lo que necesitas para escuchar del tipo “encontrarás a alguien mejor”.
– No recaigas: Si superar un enamoramiento ya es difícil, y sufres una recaída, puede pasar mucho tiempo antes de que vuelvas a salir adelante. Por ello, debes aceptar que olvidar a un amor imposible supone un proceso.
– No transfieras tus sentimientos a otra persona. Creer que estas sintiendo las mismas emociones que te producía tu ex con otra persona y transferirlo en forma de enamoramiento, es una forma de recaída que, no obstante, es injusta tanto para la otra persona –que puede haberse enamorado de forma real– como para ti mismo que, además, volverás a caer en el mismo feedback negativo.
Bibliografía
– Keller, K.(2011) Limerence: When Is It More than Heartbreak? Psychology Today
– Diamond, L. M., Hicks, A. M. y Otter-Henderson, D. D. (2008). «Every time you away: Changes in affect, Behavior and psychology associated with travel-related separations from romantic partners». Journal of Personality and Social Psychology, 95, pp. 385-403.
– Beck, A. T. (2005). Con el amor no basta. Barcelona: Paidós